Esta semana aparecieron mis padres en casa con otro bolso lleno de cosas mías de las que quieren ir desprendiendose, con la excusa que en el trastero tengo sitio de sobra para guardarlos. Una vez traidos todos los libros y apuntes, esta semana ha tocado el turno a los disfraces de Nochevieja junto con el kimono y la yukata.
¿Disfraces de Nochevieja? A nadie le sorprende? Pues así es, en Pamplona hay muy pocas personas que se difrazan en Carnavales, nuestro día es la noche de fin de año. En contra a lo que se hace en el resto de España donde la gente se arregla bastante para esa noche : vestiditos de fiesta, camisas.. aquí , el 90% de la población elige el disfraz como el mejor atuendo de la noche.
Después de esta aclaracion, quiero contaros la historia de mi kimono y de tres más que estarán en manos de Kela, Nikky e Irene.
Estando en Japón hace 10 años, una pequeña asociación de madres que se ocupaba de que conocieramos y paticipariamos de la cultura local, nos llevo a una tienda enorme de kimonos donde nos enseñaron estilos y nos vistieron con ellos. La verdad que fue una experiencia genial y muy divertida. Nos pusimos hasta quimonos de novias!! Ya con la experiencia hubiera sido más que suficiente, pero hubo algo más.
Nos dijeron que igual podían regalarnos uno a cada una. Era algo increíble y que incluso dudábamos que pudiese ser verdad, ¿habríamos entendido mal? estamos hablando de kimonos de verdad, de seda.. que valen un dineral.
Sin embargo, pocos dias antes de volver a nuestros países, nos llevaron los kimonos al colegio. Nos dijeron que eran kimonos que eran utilizados en la tienda como muestrarios y prueba para los clientes y que por eso, nos los pudieron regalar.
Cuatro kimonos preciosos que nos tuvimos que repartir. Yo ya no me acuerdo cómo fue la decisión me suena que decidimos rifarlos, pero creo que al final todas quedamos conformes con el que nos tocó. !! A que son bonitos!!!
Lo mejor de todo es que pudimos usarlos en la fiesta de despedida. Mirad que bien nos quedaban! A lo quimonos, tambien nos dieron unos obis para usar con el kimono aunque éstos no son los que realmente se utilizarían con esos kimonos, ya que normalmente suelen ser más grandes. Sin embargo, eran más cómodos para poder usarlos nosotras. Así más o menos puedo parecer una japonesita de verdad, incluso con bolso!
Lo único que da pena tenerlo tanto tiempo guardado sin ocasion de poder usarlo!
alaaaaaaaaaa que pasada!!!!!!!!!