En esta entrada, os vamos a hablar sobre la ceremonia del té. Ya que existen muchísimas webs donde se describe, hemos pensado describirla desde nuestro punto de vista. No tratar aspectos muy técnicos, sino acercaros y explicaros de una forma sencilla los pasos y detalles de esta hermosa costumbre.
Y de paso, daros unas pequeñas indicaciones para que podáis hacerla en vuestras casas 😉
Tanto Vero como yo tuvimos la ocasión de recibir clases de esta práctica tan japonesa y llena de historia cuando vivimos en Japón. Como podréis ver, yo fui vestido normal y corriente, pero Vero pudo vestir un yukata que es como realmente debe hacerse.
El proceso en sí, no deja de ser preparar y servir el té a los invitados. Sin embargo, algo tan simple como esto, esconde muchos detalles que para muchos de nosotros pueden pasar desapercibidos.
En primer lugar, los materiales. Solamente nos hará falta matcha (té verde en polvo), un chasen (茶筅) o batidor de bambú, agua y un tazón.
Para los lectores de Pamplona, podréis encontrar todo esto en la Tea Shop de la que os hablamos en una entrada anterior.
Generalmente, el té se suele servir junto a algún dulce, así que podríais servir alguna pasta o galleta.
Para preparar el té, primero limpiaremos el tazón vertiendo agua caliente y desechandola sobre otro recipiente. El siguiente paso es coger el agua que se empleará para diluir el té. A continuación, con una cucharilla hecha de bambú (chasaku – 茶杓) se vierte el té sobre el agua. Ya sólo queda coger el chasen y remover el té haciendo círculos. El último paso es formar la letra japonesa «no» (の) sobre el té. Y ya está listo para servir.
Tenemos el té preparado, ahora nos toca servirlo. Sentados en postura seiza (como podeis ver en la foto), nos acercaremos a nuestro invitado y haciendo una reverencia le ofreceremos el té. El invitado también hará una pequeña reverencia al recibir el té, en señal de agradecimiento.
Una vez nos han servido el té, comienza otra fase de esta ceremonia, la degustación. El tazón se debe coger con la mano izquierda ayudándonos con la derecha para beber. Antes de beber, se suele girar el tazón sobre la mano, para disfrutar de la cerámica. Generalmente se utilizan tazones muy bonitos con distintos dibujos y grabados.
Estos son básicamente los pasos que se siguen en la ceremonia del té. Pero no se trata únicamente de beber el té, que por cierto, está buenísimo. Esta ceremonia busca el encuentro entre todos los asistentes, poder charlar tranquilamente, disfrutar de la compañía de los demás, olvidarse de las preocupaciones, relajarse, y si puede ser, disfrutar de algún hermoso paisaje.
Por último, me gustaría enseñaros una cita que está muy relacionada con la ceremonia del té. Dice así:
Ichi-go ichi-e (一期一会) y podría traducirse como «una vez, un encuentro». Esto quiere decir que cada ocasión es única, y que no volverá a repetirse. Por eso, ocasiones como reunirse a tomar el té, deben disfrutarse como si fuesen únicas, porque realmente lo son.
Desde Nihonnipon, os animamos a que disfrutéis de una tarde de té con vuestros amigos 😉
